La Liga : “Mucha gente prefiere escuchar cumbia hecha por pibes de clase alta porque es cool”

“La Liga” presenta nuevo trabajo discográfico, “Revolución“, y antes de su lanzamiento oficial, tuvieron un mano a mano con DiarioShow.com en el que hablaron de todo: las modas musicales, la actualidad de la cumbia y la repercusión y masividad. ¡Imperdible!
 
“Revolución” es el nuevo disco de La Liga, pero también su nuevo camino. El miércoles realizarán la presentación de su nueva placa en un lugar diferente al que están acostumbrados, Niceto Club, y antes de la fecha, Tito y Leo, los fundadores del grupo, charlaron con Diarioshow.com sobre los nuevos rumbos de la banda, las modas musicales, la actualidad de la cumbia y la repercusión y masividad que lograron.
“El nombre del disco viene con el cambio musical, estético y hasta comercial diría, porque más allá de que la banda la hicimos nosotros, siempre trabajamos con representantes, que transforman el ámbito de la cumbia en un lugar muy injusto. Con Revolución llega la independecia, nosotros nos hicimos cargo de todo”, advierte de entrada Leonardo Belizán.
El cantante, por su parte, analiza la repercusión que lograron en esta nueva etapa, con fans que los siguen no importa el lugar ni la circunstancia: “El apoyo de los fanáticos es algo que nunca tiene tope. Cada vez me sorprende más la gente y las cosas que hacen: tatuajes, banderas …, recorridos … Los kilómetros que hacen para ir a un show….y gracias a dios la gente sabe lo que luchamos para llegar y lo que seguimos luchando para que esto se mantenga firme”.
Comenzaron por amor a la cumbia pero más como una aventura, aseguran, y por ello sus letras eran urbanas y testimoniales. Pero en un momento, recuerdan que “nos dimos cuenta que las canciones eran un arma de doble filo, no teníamos en cuenta lo que volvía. Por eso dimos un vuelco y comenzamos a entregar un mensaje positivo, dejamos de lado un estilo de composición más de calle para hacerlo más revolucionario, de protesta”.
“Seguimos buscando nuestro sonido, es algo que no se termina”, comenta Leo sobre la construcción permanente de la banda, aunque aclara que debe remarse en un clima muy adverso: “Hay un prejuicio con la cumbia, pero también una realidad. Entre todos los colegas decimos que está para atrás. El negocio está para atrás, no hay boliches… A nosotros por suerte nos sucede todo lo contrario, trabajamos más. El sistema macabro y perpetuo de la cumbia era armar una banda en el barrio, que suenen, las llevamos a los bailes, facturar todos los fines de semana cuando se acaba que pase la que sigue, en el pensamiento de los representantes, y eso tiene que cambiar. Desgraciadamente eso no sale gratis, La Liga renunció a la avaricia económica para tener más calidad”.
Las injusticias
Los chicos se interesan en el tema del negociado porque pueden comentarla como sobrevivientes, en un momento difícil para el género: “La música es muy injusta. Aparecen cosas que no tienen nada que ver y lo dejan a uno pensando qué tan bien hago las cosas yo que las cosas malas se llevan el rédito. En los Gardel dejaron afuera muchos discos y bandas de cumbia que tienen un gran sonido, 100% cumbia”.
Hablando del sub-género bastardo “cumbia pop”, que musicalmente es similar a la cumbia pero carece de la identidad del sonido ya casi folclore en nuestro país, Leo comenta que “mucha gente como nosotros labura y trata de hacer la diferencia en un lugar que está desmerecido acá. Hay personas que solamente valoraron a Rodrigo, Leo Mattioli y Gilda cuando ya estaban muertos. Y están los cuatro pibes que ni siquiera saben tocar cumbia como se debe, hacen un cover de Abel Pintos, Cerati, fuera de tempo y la gente los escucha porque prefieren escuchar cumbia hecha por pibes de clase media alta, porque es ‘cool’. La gente marca el prejuicio, no las bandas”.