24 de septiembre de 1994, ese día nacía La Barra, uno de los grupos cuarteteros que a lo largo de su historia se ganó el corazón de miles de fanáticos y se posicionó como uno de los conjuntos más importantes del folklore cordobés.
En el marco de su aniversario número 30, Javier la Pepa Brizuela y Carlos De Piano pasaron por Cuarteteando para realizar un viaje al pasado con un recorrido por distintos momentos que marcaron su vida. Sus primeros pasos, la decisión de abandonar Trulalá después de cinco años y apostar por su propio proyecto artístico, ser pioneros en llevar el tunga tunga al exterior, tocar en escenarios donde nunca antes había sonado el género popular, entre otros hitos.
Sabia decisión
La Pepa y Carlos iniciaron su vínculo en la Universidad del Cuarteto bajo el ala de Manolo Cánovas, el creador de una de las bandas más importantes. Tan solo cinco años fueron suficientes para adquirir cierta cantidad de conocimientos que los llevaron a tomar la decisión de abandonar el lugar y soñar con un proyecto que los llevaría a desandar su propio camino. “Yo creo que todo tiene un ciclo, nos fuimos en el momento justo” recordaron los colegas ante las primeras imágenes de sus inicios.
Si bien ambas figuras mantienen presente su paso por Trula, los artistas coincidieron en que ya era hora de alejarse del grupo para comenzar a tomar sus propias decisiones y dejar volar esas ideas que tras el paso del tiempo notaron que fue lo correcto. No pasa nada, uno de sus primeros cortes en 1994 y un jugado videoclip que para ese entonces no era algo habitual, La Barra tomó el riesgo de lanzar su apuesta audiovisual y empezar a dejar su huella en la historia del cuarteto.
