El Loco Amato volvió al escenario del Quality Arena en el marco del festejo de su cumpleaños número 52. El cuartetero se presentó ante un marco de público inmejorable que a más de una semana del evento ya había agotado todas las entradas.
Entre la pequeña pausa del baile, minutos antes de las 4 de la madrugada, Cristian dialogó con Cuarteteando y compartió su alegría de estar celebrando un nuevo año de vida junto a sus fanáticos, o mejor dicho, su “comunidad” como definió el vínculo que mantiene con sus seguidores.
El público también tuvo su posibilidad para compartir qué le regalaría al Loco. Un bizcochuelo, ramo de flores, asado, whisky, abrazos, fueron algunas de las opciones que expresaron. Otra fanática fue un poco más allá y resaltó esa “esencia única” que mantiene y la humildad que manejó a lo largo de su extensa carrera.
Tras la consulta sobre cuál sería su regalo ideal, el artista no dudó en responder sobre el obsequio más valioso que recibe cada fin de semana en los escenarios. “El mejor regalo son ellos. Siempre les digo gracias por el aguante”, destacó orgulloso.
El Quality fue el recinto que acobijó a miles de personas que acompañaron a Cristian Abel en la fiesta de su cumpleaños. Minutos antes de las 2 de la mañana subió al escenario para comenzar a deleitar al ritmo de sus grandes éxitos y se extendió por casi dos horas, sin parar. Tras una breve pausa que no duró más de diez minutos, Amato regresó para continuar y “pegarle derecho” hasta el final de la noche.
