Mauri Cánovas homenajeó a Pablito Ravassollo

El 25 de febrero de 2006, la música de Córdoba se vistió de luto. En un terrible accidente automovilístico, la ruta se llevó la vida de Pablo Ravassollo, cantante de Trulalá.
Tenía tan solo 23 años, pero una larga y prometedora carrera por delante. Su recuerdo quedará para siempre en los trulaleros.
Este domingo se cumplió un nuevo aniversario de su muerte. En las redes, hubo varios homenajes. Pero el que más emocionó, fue el de Mauricio Cánovas.
El hijo de Manolo escribió unas líneas con mucha emoción para su amigo. En ellas, contó cómo fue que Pablo llegó a estar al frente de la mítica banda.

“Llegaste a nuestras vidas, a trula por un casting donde había más de 100 cantantes y te elegí, te elegimos entre todos ellos porque eras un ángel, porque tenías esa luz increíble”

Además, recordó a su papá, el histórico creador de la banda, fallecido en el año 2000.
Este es el mensaje completo que escribió Mauri, para emocionarse:
“Hoy se cumple un año más que no estás con nosotros, se cumple un año más de esa maldita y horrible noche donde íbamos a un baile más.. que la vida eligió llevarte, porq estoy seguro que eras demasiado para esta vida… llegaste a nuestras vidas, a trula por un casting donde había más de 100 cantantes y te elegí, te elegimos entre todos ellos porq eras un ángel, porq tenías esa luz increíble.. nos costó, vaya si nos costó.. había gente muy injusta en ese entonces como los hay ahora, no nos dejaban en paz, no te dejaban en paz diciéndote q lo de antes era mejor.. subiste al escenario sin medir nada, solo darle alegría al trulalero y en unos añitos los cautivaste a todos y en ese momento decidieron llevarte allá, allá donde esta mi papá y solo espero que estés con él juntos.. te amo amigo y gracias a dios te lo dije en vida… nunca te olvidaré, ahí estarás para siempre.. pase lo que pase.. obvio que algún día nos volveremos a ver y vamos hacer cuarteto de nuevo juntos… abrazo hermano para siempre…”
Ravassollo había ingresado a Trula a fines del año 2002, en reemplazo de Cristian Amato. Cantaba junto a Alejandro Ceberio.
Su debut fue en el disco Con toda la fuerza, en 2003. Su primer gran éxito en la banda fue “Hay algo en ella”. 
Aquella madrugada trágica, Pablo se dirigía a Santa Rosa de Calamuchita, donde la banda daría un show. Por alguna injusticia del destino, falleció en un tremendo accidente junto a un amigo de la banda.